Washington, 2 de marzo del 2007.- Esta mañana miembros de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos recibieron los testimonios de personas afectadas en sus derechos fundamentales por las industrias petroleras y mineras.
Diócles Zambrano de la Red de Líderes Comunitarios “Ángel Shingre”, detalló ante la Comisión los hechos de violencia generados por las empresas petroleras que operan en la provincia de Orellana. Hizo particular referencia a los hechos de julio del 2006, en que las Fuerzas Armadas reprimieron a las poblaciones campesinas que reclamaban en contra de PERENCO por los daños en su salud, medio ambiente calidad de vida. Diócles informó sobre la persecución a defensores de derechos humanos, como la detención ilegal y el enjuiciamiento en fuero militar de Wilman Jímenez.
También estuvo presente en la audiencia Salvador Quishpe, quien en diciembre del 2006 fue detenido y torturado por miembros del Fuerzas Armadas. El Diputado Quishpe ha estado denunciando las violaciones de derechos humanos cometidas por Ecuacorriente en la provincia de Zamora.
Los Comissionados también se informaron sobre las violaciones de derechos humanos cometidas por Ascendant Copper SA en la Zona de Íntag.
Un informe sobre la situación de las personas y pueblos afectados por las actividades mineras y petrolera en el Ecuador, elaborado por CEDHU, Acción Ecológica, DECOIN y CDES, fue entregado la Comisión Interamericana.
Durante la audiencia, la Comisión exhortó al Estado Ecuatoriano a pronunciarse sobre las medidas cautelares anteriormente recomendadas en los casos del pueblo Sarayaku y del Pueblo Taromenane.